Dec 28, 2011

“Con los pies fríos no se piensa bien”

Noruega es un país frío, no cabe duda. Sin embargo, las bajas temperaturas les sientan bien y, al contrario que en la popular canción de Pereza, el intenso frío parece mantenerles las ideas claras.

No es necesario dominar el idioma noruego para hacerse entender en tierras nórdicas. Prácticamente toda la población es bilingüe y se expresa perfectamente en inglés. Este hecho (ya de por sí envidiable y asombroso desde la perspectiva española) se agudiza al centrarnos en la infancia. Los niños noruegos también saben inglés y además, se encuentran muy cómodos hablándolo. Siendo “una española viviendo entre noruegos” me sorprendió mucho poder conversar con niños de doce años que, muy a mi pesar, presumían de tener el mismo nivel de inglés que yo.

Dentro de todas las posibles explicaciones para este fenómeno, me inclino a pensar que la programación televisiva tiene mucho que ver con la pasmosa facilidad de los noruegos para aprender inglés. Como en muchos otros países europeos, las cadenas noruegas no doblan los contenidos extranjeros que programa en sus parrillas. Al contrario que en España, donde parece que hemos generado una especie de fobia a ver películas o series en un idioma que no sea español, los noruegos crecen (física y televisivamente hablando) expuestos a contenidos en inglés diariamente. No sólo la televisión, el cine también opta por subtitular las películas en lugar de doblarlas en el idioma nacional. De esta manera, cuando un niño noruego comienza a ir al colegio y, por lo tanto, a aprender inglés, este idioma no es totalmente desconocido para él y, lo que es más importante, encuentra un refuerzo al llegar a casa donde tiene la posibilidad de ver una serie en el idioma de Shakespeare. Es aquí donde encontramos otro punto a destacar en la programación noruega. A partir de las 6 de la tarde, la cadena pública NRK ofrece desde hace décadas una gran variedad de programación infantil que sigue unos estrictos parámetros de calidad y que, sin renunciar al entretenimiento, refuerza los contenidos que el niño ha adquirido en la escuela. Como comentábamos en uno de nuestros anteriores post, la buena gestión de una televisión para la infancia se torna fundamental en el crecimiento emocional e intelectual de los más pequeños.

En definitiva, creo que a los niños noruegos se les está brindado una gran oportunidad. Todas sus tardes se llenan de contenidos infantiles de calidad y además, muchos de estos contenidos se ofrecen en versión original subtitulada. Poco a poco, como la gota de agua que termina abriendo un surco en al roca, estos niños reciben información en inglés que les facilitará el aprendizaje y el recuerdo de esta lengua fundamental y universal.

Autora: Elisa Morales

2 comments:

  1. Estoy completamente de acuerdo que nuestros niños y jóvenes españoles tienen un nivel de inglés desastroso, y no se ha apostado lo suficiente por todas las posibilidades que ofrecía el mundo audiovisual y del entretenimiento. Aún así resaltaría algunos factores que facilitan que los niños escandinavos y holandeses aprenden el inglés con suma facilidad, son lenguas germánicas que comparten una etimología, gramática y fonética cercanas, e históricamente han sido países muy cercanos al área de influencia directa y económica de Inglaterra, el contacto con el inglés tiene mucha más tradición que en el sur de Europa. Pero tener un poco más de dificultades no es excusa para no haber redoblado esfuerzos, uno de los suspensos rotundos del sistema educativo español ha sido el inglés, ver a nuestros jóvenes mejor formados y preparados que apenas pueden chapurrear inglés es desalentador, cuando efectivamente solo bastaba con haberles imbuido más en esa lengua desde pequeños, pero faltó la voluntad, y sigue faltando...

    ReplyDelete
  2. @Milius, gracias por completar este post con esa información sobre las lenguas germánicas. Creo que tienes razón y es cierto que muchos términos y fonemas son similares. Supongo que todo suma y que si a una dieta cultural rica en contenidos en inglés le añadimos las facilidades propias de hablar un idioma más cercano, pues obtenemos como resultado niños (¡muy rubios!) y con un dominio del inglés asombroso. Lo que creo que debemos tener claro es que, como tú bien dices, las dificultades no deberían limitarnos sino que tendríamos que haber creado un proyecto más fuerte y completo para aprender/enseñar inglés.En lugar de utilizar estas dificultades como retos, las hemos convertido en excusas.

    De nuevo, gracias por completar este proyecto. Espero que sigas leyendo y participando. ¡Gracias!

    ReplyDelete