En
la poco o nada candente parrilla televisiva en la que a diario implicamos a
unos sentidos carentes de esa expectación que se prodigara en épocas
pretéritas, las cuales, de forma espontánea regresan a la memoria para suplir
de alguna manera elementos de calidad que el sufrido espectador espera como
agua de mayo; la firma eminente con la que algunos trabajos para la pequeña
pantalla vienen respaldados hace que esa ilusión por degustar alguna suculenta
vianda en forma de serie u otro tipo de preparado televisivo cobre especial
relevancia.
Tal
es el caso de La Cúpula,
que estrenara su primera temporada en junio de 2013, avalada por la insigne
producción de Steven Spielberg, apostando éste sobre seguro al adaptar la obra
homónima de Stephen King, otro grande en esto de encandilar con la luminaria
siempre atrayente de la ciencia ficción, en este caso impresa sobre el papel.
Arropada
por creador y mecenas, la serie de CBS entra por la puerta grande de una
pantalla cada vez más reducida a meros ejercicios de luchas encarnizadas por
audiencias enquistadas en estadísticas de cuotas de pantalla. Y es que frente a
tan eminentes avales, poco o nada se puede objetar al respecto salvo quizás,
cuando en el fragor obnubilante de tan singular batalla por la atención del
mayor número posible de televidentes, estiramos demasiado un determinado
producto que en principio, cuando sus propiedades innatas de atraer hacia sí
ingentes cantidades de espectadores permanecían intactas, resulta del todo
satisfactorio e incluso brillante en cuanto a la idea primigenia con la que
viera la luz dicho proyecto, y así se reflejó en las críticas vertidas sobre su
estreno en Estados Unidos. Críticas favorables hasta que emitidos ya 8
episodios, esta singular balanza de pros y contras empezaba a inclinarse por
mor de diferentes medios especializados, hacia el lado oscuro. Aunque su
creador literario defendió su calidad pese a admitir diferencias sustanciales
con la versión original, ésta no pudo zafarse de las voces que clamaban contra
una historia que no daba más de sí.
Aún
con una crítica reacia, y sin embargo
con una cuota de pantalla nada despreciable,
la serie vuelve estos días con su 2ª temporada en la que se prometen
cambios sustanciales para acallar voces disidentes o, en su defecto, avalar
esos datos de audiencia que en España rondaron una media de 19,2 % de share y
casi 3.400.000 espectadores, según fuentes de Atresmedia.
El
pasado día 30 de junio se estrenó en su país de origen el primero de sus 13
episodios, con nuevas incorporaciones como la de Karla Crome y Eddie Cahill y con el aliciente añadido de llevar la firma del
mismo Stephen King. Aquí no tardaremos mucho más en ratificar o no si esta
cúpula está perdiendo ese poder de retención de masas tan efectivo, ejercido
hasta ahora.
Carlos Pérez
“Under the Dome”, season 2
Such is the case of "Under the dome", which premiered its first season in June 2013,
endorsed by the famous production of Steven Spielberg, making a safe bet adapting the
homonymous work by Stephen King,
another great author in encouraging with the always fascinating light in
science fiction, in this case printed on paper.
Surrounded by creator and patrons, this CBS series
makes a grand entrance in a screen more and more reduced to mere exercises of
fierce fights for audiences enclosed in statistics of screen quotas. And it is
that against so eminent guarantees, little or nothing can be objected to this
regard, except perhaps when in the bewilder roar of such a singular battle for
the attention of the largest possible number of viewers, we stretch too much a
product that, at the beginning, when its inherent properties attract vast
amounts of spectators remained intact, it has been quite satisfactory and even
bright as the original idea with which this project was created, and so it was
reflected in the criticism about its USA release. Positive reviews until the
first 8 episodes were released; this unique balance of pros and cons began to
lean for the sake of different specialized media, to the dark side. Although
his literary creator defended its quality despite admitting substantial
differences with the original version, this could not avoid of the voices that
clamored against a story which itself was no longer interesting.
Even with reluctant reviews, and yet with a not
insignificant share, the series returns these days with its 2nd season in which
substantial changes are promised to silence dissidents or failing voices, or
alternatively, endorse these audience figures that in Spain encroached an
average of 19.2% of share and almost 3.400.000 spectators according to
Atresmedia sources.
Last 30th of June was released in its home
country the first of its 13 episodes, with new additions like Karla Crome and Eddie Cahill
and with the added attraction of bear the signature of Stephen King himself.
Here it won´t take much longer to ratify or not if this dome is losing that as
effective retention of mass power, exercised so far.
Carlos Pérez
Review: Pilar Colomo
No comments:
Post a Comment