‘Captain Fantastic’ o cómo reflexionar sobre la educación de los hijos

 ‘Captain Fantastic’ o cómo reflexionar sobre la educación de los hijos

Victoria Sotomayor

Título original: Captain Fantastic   

Dirección: Matt Ross               

Año: 2016

Duración: 118 minutos

Nacionalidad: EE. UU.

Género: Drama | Comedia | Familiar

Guion: Matt Ross

Distribuidora: Bleecker Street

Productora: Electric City Entertainment ShivHans Pictures

Reparto: Viggo Mortensen, George MacKay, Samantha Isler, Annalise Basso, Nicholas Hamilton, Shree Crooks, Charlie Shotwell, Kathryn Hahn, Steven Zahn

Disponible en: Netflix

Si algo caracteriza a ‘Captain Fantastic’ es que, a pesar de ser un filme estadounidense, no es la típica película americana. Acostumbrados a una acción rápida con diálogo en cada momento y banda sonora en todas y cada una de las escenas, esta cinta independiente destaca por ser todo lo contrario. El sonido ambiente y los silencios se convierten en protagonistas de una trama bastante inusual que animan desde el primer minuto a la reflexión.

Matt Ross presenta la historia de Ben (Viggo Mortensen), un padre que vive con sus seis hijos en plena naturaleza. Durante los últimos diez años han estado aislados de la vida moderna y la tecnología, viviendo de forma independiente y con una filosofía propia. Pero una tragedia hace que deban volver al mundo exterior, poniendo a prueba las ideas de Ben sobre la educación de sus hijos.

‘CaptainFantastic’ es una de esas películas que logran que, con solo ver la primera escena del filme, quieras conocer más sobre ella. Si bien es cierto que la trama es lenta, no hay ninguna escena que esté de relleno. O al menos da esa sensación de compenetración gracias al buen argumento y a la química entre los actores. De hecho, la química de Mortensen con los niños logra atravesar la pantalla, haciendo que se sienta real.

Además, el dialogo reflexivo y natural -con un toque cómico en ocasiones- logra que el espectador conecte con los diversos personajes de esta historia. Y precisamente esto es por lo que destaca. La gran habilidad de la cinta es que consigue que el espectador tenga de principio a fin el debate interno sobre cuál es la mejor forma de criar a un hijo.

A lo largo de toda la película, el público pasará de estar de acuerdo con el punto de vista de Ben hasta estar totalmente en contra. Y eso es algo que hay que valorar positivamente, ya que logra crear una conexión con el espectador y hace que este se meta de lleno en la narrativa.

Sin embargo, el talón de Aquiles de este filme es su incansable necesidad por que todo sea positivo u optimista tras una escena trágica. Con esto consigue que temas interesantes – en muchos casos son asuntos considerados tabú- no se traten con la profundidad que requieren y merecen. Y eso es algo que, sin duda, se podría haber incluido en la película.

Ya que la cinta es una crítica expresa al sistema capitalista y a la sobreprotección parental, ¿por qué no atreverse a explorar esos temas tabúes también? Al fin y al cabo, forman parte de esa crítica que la propia película está haciendo. La incorporación de estos temas al filme hubiese ayudado a desarrollar las tramas de algunos de los niños, haciendo que no quedasen tan planas.

‘Captain Fantastic’ probablemente no es la mejor producción audiovisual que se haya hecho, pero tiene algo importante: consigue plantear cuestiones sobre la educación que se da a los hijos que el espectador -quizá- no ha reflexionado antes. O al menos, la película presenta varias perspectivas sobre este tema, aclarando que la crianza de los menores no es una receta que solo se pueda elaborar de una manera.

En definitiva, esta película de Matt Ross es entretenida, emotiva, con un espíritu particular y una enseñanza vital.